sumido en el letargo de la oscuridad
soñando ke la luna y el sol se han unido
como nuestras almas, de madrugada.
Aquella noche en que besé tus labios de miel,
saboreando tu dulzór con intensidad,
me embargó un inmenso escalofrio jamas sentido,
descubriendo los sentimientos de mi mujer soñada.
Escucha el sonido de mi latir
Observa mi mirada enamorada
Descubre rauda lo que tu me haces sentir,
y vente a darme calor cada noche, cada madrugada.